jueves, 9 de febrero de 2012

GARZÓN Y SU CICUTA



GARZÓN Y SU CICUTA

A Garzón su antiguo oficio de desenterrar cadáveres de la guerra civil española le ha salido caro. Hace 3 años tuve cierta visión de futuro cuando le auguré una nefasta carrera como juez estrella. De funcionario público a cargo del PSOE cobrando cuantiosos estipendios del Banco Santander ha pasado a ser un apátrida de la Justicia.

Abrió infinidad de expedientes y casi ninguno los cerró con eficacia. Actuó contra el anciano Pinochet, contra ETA y con narcos que evadieron la ley por causas fuera de plazo, saliendo un día sí y otro también en los telediarios.

Baltasar Garzón es un virrey destronado y ni él mismo se cree su mala fortuna. Ahora está “hecho polvo” según palabras de su abogado Francisco Baena Bocanegra. Condenado a 11 años de inhabilitación por prevaricación y escuchas ilegales en el caso Gürtel, debería dar la callada por respuesta y no apelar al Tribunal Europeo de los Derechos Humanos.

¿Por qué? Por la sencilla razón de que su propia egolatría le hizo delinquir entrometiéndose en los derechos de los demás, sean o no sospechosos, y encima cobrando cuantiosos emolumentos y becas en EEUU a costa del erario público. Por ello tiene 2 causas abiertas con el Supremo: la ley de la Memoria histórica y los cobros de Nueva York.

El PSOE e Izquierda Unida se rasgan las vestiduras y están ‘preocupados’ por la sentencia contra el Juez cuya estrella ha dejado de brillar. Hasta hace poco sacó relumbre a su oficio de magistrado dándole coba al poder y desenterrando cadáveres de una guerra que muchos querían olvidar, y ahora Baltasar Garzón tiene que enterrar la toga si lo echan de la Judicatura.

Ya no le sirve a la Izquierda (es un lastre) y durante años fue el tonto útil que sirvió para avivar los fantasmas del pasado. El Cementerio que invadió el Juez para airear huesos y esparcir sangre ha violentado a los muertos.

Y ahora Garzón es un cadáver exquisito bebiendo de su propia cicuta, un difunto de la mediocre posteridad.



ROSA MARÍA VERA

No hay comentarios:

Publicar un comentario