lunes, 27 de mayo de 2019

LA REFORMA ELECTORAL





LA REFORMA ELECTORAL


   La Sociedad civil malagueña tiene como objetivo prioritario e irrenunciable la reforma del régimen electoral general. Es nuestro caballo de batalla, el sueño que muchos ciudadanos anhelan y que los partidos políticos nunca se atreven a promover

   La LOREG (Ley orgánica del Régimen electoral general) entró en vigor en 1985 y se modificó por última vez en octubre del 2018 para aprobar el derecho al voto de las personas con discapacidad. Esta ley regula aspectos como quién puede votar, y quién tiene derecho a presentarse a las elecciones; cómo se forman las Juntas y Mesas electorales, la financiación de los partidos, los delitos electorales, etc. Los 350 diputados del Congreso se dividen en 52 circunscripciones: las 50 provincias españolas más las ciudades autónomas Ceuta y Melilla.

   Cada una de estas circunscripciones tiene asignada un número de diputados: uno en Ceuta, otro en Melilla, y un mínimo de dos por provincia, aunque este número aumenta en función de la población. Sería el número de votos dividido por el número de diputados aplicándose la Ley D’Hont. No tendrían ninguna influencia los votos nulos y las abstenciones, y los votos en blanco cuentan con un valor anecdótico.

   El Consejo de Estado reconoce al respecto que el actual sistema electoral perjudica a las formaciones con un apoyo en votos a nivel nacional entre el 3% y el 15 % debido a la división innecesaria en 52 circunscripciones, y que fue introducida al redactar la Constitución. De los 350 escaños del Congreso, la mitad 175 se reparten en provincias que asignan de 1 a 7 escaños. Con un 15 % de los votos lo normal es no conseguir ningún escaño en estas provincias y los votos se pierden por completo.

   Existen soluciones sencillas como dar mayor peso a las provincias pequeñas (entre 3 veces y 1,2); pero mantener una única circunscripción nacional para repartir los 350 escaños acarrea la pérdida de identidad de los representantes con los representados y no se incluyen candidatos de todas las provincias.

   La Ley sigue siendo desigual y desproporcionada porque se votan listas de partidos y no a representantes políticos. La SCM sigue en su lucha por reformar una LOREG que puede mejorar y reducir su inoperancia y degradación, barajando alguna opción como es el sistema alemán, donde la mitad se elige por un sistema mayoritario y la otra mitad por el sistema proporcional. También sería necesario que haya una proximidad geográfica y que los ciudadanos conozcan las cualidades de sus candidatos y tengan su confianza a la hora de pedir responsabilidades.

   Una Ley electoral justa y equitativa es tan importante como la propia Constitución, donde dice en su artículo 1.2, que la soberanía nacional reside en el pueblo español del que emanan los poderes del Estado

   Por ello los políticos son trabajadores que tienen que velar por los ciudadanos, y no al revés. Aún tienen que entender que un cargo no es vitalicio y que la profesionalidad de la política conlleva atender las necesidades de un pueblo, manteniendo un modelo territorial que respete las autonomías, consolidando un Estado de Derecho que asegure el Imperio de la Ley, y abordando una crisis que corroe las entrañas de un País que tienen la obligación de defender. 

Una Nación que despierta de un intenso letargo económico.
 

ROSA MARÍA VERA